domingo, 29 de diciembre de 2013

Nunca jamás de Dunia Wassertrom



Hola, espero que se encuentren muy bien.

Antes que nada les deseo a todos una Feliz Navidad atrasada, espero que hayan cenado muy rico y que hayan disfrutado mucho al lado de las personas que aman. Un abrazo para todos ustedes.


Ahora sí, les voy a comentar un poco sobre el primer libro que terminé en diciembre y seguramente será el único.

Se trata de Nunca jamás, escrito por Dunia Wassertrom, una mujer de origen ruso que sobrevivió a Auschwitz.

La edición que yo adquirí no es la que aparece en la imagen, es una edición nueva y consta de 252 páginas.

El libro está dividido en tres partes; en la primera parte Dunia cuenta cómo era su vida antes del Holocausto nazi, habla de su deportación y del trabajo que tuvo que hacer para los nazis dentro del campo de concentración Auschwitz- Birkenau.

La segunda parte trata de cómo cambió su vida después de haber salido del campo de concentración cuando por fin Alemania fue derrotada. Nos cuenta cómo esa tan anhelada libertad tardó en llegar a su vida, de los miedos que nacieron de haber vivido durante algunos años en un campo de concentración y de haber sido testigo de las peores atrocidades.

Y finalmente en la tercera parte, se muestran algunos documentos sobre algunas publicaciones periodísticas que salieron cuando se estrenó una obra teatral inspirada en el testimonio de Dunia y otros sobrevivientes.

Este título forma parte de una colección que se llama Archivo secreto, de la que también forma parte el anterior libro que comenté llamado Yo fui el médico del diablo.

El libro de Dunia es muy breve y su experiencia es como otras historias de sobrevivientes: terrible.

Casi al final del libro, cuando ella habla de cómo fue su vida después de Auschwitz, hay una parte en la que años después de haber salido del horror, se ve en la necesidad de viajar por primera vez a Alemania, cuando ésta se dividió por el muro,

Dunia, se encuentra con una mujer asomada en un balcón, que miraba con lágrimas en los ojos a una mujer que estaba del otro lado del muro.
La mujer del balcón le preguntó a Dunia por su nacionalidad y le dijo:
- ¿Ve usted a esa mujer del otro lado? Es mi hermana, no he estado con ella desde que levantaron este vergonzoso muro, y ni siquiera he obtenido permiso durante las fiestas de Navidad para ir con ella....
Este muro es una vergüenza para todo el mundo. ¿ porqué los franceses, que son ahora nuestros amigos, no nos ayudan? Señora, usted me entiende... ¿por qué no dice nada?

Dunia respondió.
- Sí, la entiendo muy bien. ¿ Mandan a las cámaras de gas a los habitantes del Berlín Este? ¿Los matan, les pegan, viven ellos en barracas de madera, sin comida, sin agua y sin calefacción?

Entonces Dunia le mostró el número que llevaba tatuado en su brazo, diciendo a la mujer del balcón que esa era la vergüenza del pueblo alemán, a lo que la mujer respondió:

- Pero pagamos por eso que usted tiene señora; yo pago de mi sueldo doce marcos mensuales.

*

Es terrible como en ese entonces y aun ahora hay personas que niegan el Holocausto nazi.
Historia que vale la pena conocer, si se interesan por el tema.